PLANETAS GENERACIONALES

(URANO, NEPTUNO Y PLUTÓN)

Son los más alejados al Sol, y por lo tanto de la Tierra, cuyos lentos ciclos orbitales los mantienen largamente en cada signo. Por esta razón influyen en toda una generación y sus tendencias, ideales, costumbres y devenir histórico, indicando nuestra participación en ello.

URANO

Marca una individualidad muy fuerte, con deseo de destacar, salirse de los moldes de su tiempo, nadando siempre a contracorriente. Originalidad, independencia y sobre todo libertad, rompiendo con los cánones establecidos. Rige la ciencia de la Astrología.

OURANOS: Ouranus  significa “firmamento”. Por eso es el Dios personificado de los cielos.

NEPTUNO

 

Este planeta influye en las tendencias místicas y el deseo de sublimación espiritual y la compasión. También se relaciona  alucinaciones y delirios.  El inconsciente colectivo.

POSEIDÓN: Simbolizado por las aguas, concretamente los mares. Por eso es el Dios y no de los más grandes, en el que su dominio era del mar y las aguas, que controlaba las fuerzas de la naturaleza como los terremotos y las tormentas. Su efluvio despierta la curiosidad de todo lo místico.

PLUTÓN

Este planeta de dimensiones más pequeñas que el resto de los planetas, fue descubierto en  1930, en febrero concretamente.

Indica deseos de poder, ansias de dominación y transformación del mundo. Puede conllevar conductas obsesivas o violentas. Es el arquetipo de la renovación, la muerte y la transformación.

Hades (el invisible): Llamado así a este Dios de la mitología griega porque el poder que le otorgaba el casco forjado por los cíclopes, tenía ésta virtud, la de la invisibilidad.

Dios del inframundo, por eso representa la muerte, pero también la transformación después de esta, ya sea una muerte simbólica o una muerte física.